En la industria de México y el mundo, la exposición a sustancias químicas peligrosas es una realidad diaria para millones de trabajadores. Desde solventes corrosivos hasta residuos tóxicos, el riesgo no solo está en la inhalación o el contacto con la piel, sino también en el derrame accidental que puede causar quemaduras graves e incapacidad permanente en los pies.
La prevención y el cumplimiento de las normas (como la NOM-018-STPS, que pide un sistema armonizado para la identificación y comunicación de peligros) son obligatorios. Sin embargo, la primera línea de defensa siempre será el Equipo de Protección Personal (EPP) adecuado.
1. La Vulnerabilidad de los Pies ante Químicos
El pie es una de las partes del cuerpo más vulnerables en entornos industriales, y la exposición a químicos ocurre frecuentemente de dos maneras:
- Derrame Accidental: La caída o salpicadura directa de líquidos corrosivos, ácidos o bases.
- Exposición Prolongada: Trabajar sobre pisos que retienen residuos químicos o solventes que pueden penetrar materiales de baja calidad.
Un calzado incorrecto puede disolverse, degradarse o permitir la absorción del químico, lo que resulta en quemaduras químicas de primer, segundo o tercer grado, cuya recuperación es lenta y dolorosa.
2. ¿Qué Tipos de Calzado de Seguridad Necesitas?
Cuando trabajas con químicos, el calzado debe ir más allá de la simple punta de protección. Debes buscar características de resistencia específica:
Botas de Goma o PVC (Policloruro de Vinilo)
Son la primera opción para ambientes húmedos o con alta presencia de solventes, ácidos o grasas. La clave está en la composición del material:
- PVC: Excelente resistencia a bases (álcalis) y ácidos diluidos. Son económicas y ofrecen buena flexibilidad.
- Goma de Nitrilo: Más resistentes a los aceites, derivados del petróleo y algunos solventes orgánicos. Son ideales en la industria petroquímica.
La Importancia de la Suela
La suela debe ser lisa o tener patrones que faciliten la limpieza y eviten que se queden atrapados residuos químicos que puedan ser arrastrados a otras áreas. Además, la suela debe ser antideslizante para evitar caídas sobre pisos mojados o resbalosos.
3. La NOM y la Ficha de Datos de Seguridad (FDS)
Para elegir el calzado correcto, no basta con adivinar. Debes consultar la **Ficha de Datos de Seguridad (FDS)** de cada sustancia química que manejes. Esta ficha (exigida por la NOM-018-STPS) indica claramente el Equipo de Protección Personal (EPP) obligatorio, incluyendo la resistencia de los guantes, mascarillas y, por supuesto, el calzado.
Si la FDS indica “requiere protección contra corrosivos”, tu departamento de seguridad debe adquirir botas con certificación de resistencia química comprobada.
Conclusión: Inversión en Prevención
El costo de un par de botas de seguridad industrial con resistencia química es insignificante comparado con el costo de una baja laboral, el tratamiento médico de una quemadura química o las multas por incumplimiento de la NOM. En entornos peligrosos, la protección de los pies no es un accesorio, es una obligación legal y moral.
Este artículo es informativo. Consulte siempre a un profesional de Higiene y Seguridad Industrial para aplicar la NOM correcta a su entorno laboral específico.


